10 pasos para nutrir tu mente en abundancia
Nutrir tu mente es tan importante como nutrir tu cuerpo, en ambos casos estamos aportando energía que será utilizada por nuestro organismo para hacer que este funcione de manera eficiente y se sienta saludable.
Somos Seres integrales que nos manejamos bajo un perfecto equilibrio entre pilares que incluyen el cuerpo físico, psicológico, emocional y espiritual.
Nosotros estamos muy acostumbrados a tratar lo que es evidente, lo que podemos ver, tocar y es por eso que se nos hace más fácil tener una idea de cómo nutrir nuestro cuerpo para que se mantenga en buen estado. ¿Pero qué sucede con esa energía más sutil, a la que por lo general no se le presta tanta atención como es nuestra mente?
Lo que ves, lo que escuchas, lo que piensas, las personas que te rodean… todo esto va alimentando tu mente e incorporándose a tu identidad.
El ambiente con el cual nos relacionamos por ejemplo influye porque somos seres emocionales, pero este no es un parámetro que determina de manera definitiva nuestra forma de pensar, es mas no podemos otorgarle ese privilegio a tal punto que nos afecte y contamine. Lo que si nos puede ayudar es buscar que nuestra mente este equilibrada ya que de esto dependerán nuestras emociones y acciones.
Por esta razón hoy quiero compartir algunos tips que podrán ayudarte a mejorar la calidad de esa energía que concentras en tu mente.
¿Qué debemos hacer para nutrir nuestra mente?
Algo que alimenta profundamente a nuestro cerebro es el sueño. Cuando dormimos lo suficiente tomando en cuenta las horas y que el sueño sea sin interrupciones o estimulado por el consumo de somníferos, garantizamos recuperación, reparación y desintoxicación de nuestro organismo, lo que nos prepara con gran energía para afrontar un nuevo día.
Quienes duermen poco lamentablemente son más propensos a sufrir un deterioro cognitivo y enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer, a subir de peso y a sufrir constantes cambios de humor. Por lo tanto, la higiene del sueño es fundamental para preservar nuestra salud.
El tema de la alimentación es de vital importancia ya que los alimentos que se ingieren tienen un impacto enorme no solo a nivel físico, sino que afectan desde nuestros niveles de energía hasta comprometer nuestra salud cerebral. Alimentos como vegetales de hojas verdes, bayas, nueces, pescado azul y cacao son grandes aliados para nuestro cerebro.
Dedicarnos tiempo a la recreación también representa una forma de alimentar nuestro cerebro porque le damos espacio a esas cosas que nos gustan y de las cuales disfrutamos. Por eso es importante incorporar actividades creativas y que nos conecten con la alegría.
Les parecerá extraño, pero también el no hacer nada, lo que equivale a desconectarse de la normal rutina es muy regenerador para nuestra mente porque rompemos con patrones repetitivos y nosotros estamos en la capacidad de sorprender nuestro cerebro con algo que desconoce como el descanso.
Relacionarnos con otras personas es muy favorable ya que somos seres sociales que disfrutamos del contacto con el otro, pero también en este caso nos ayudaría más establecer conexiones que nos nutran, personas que nos aporten, con las cuales podamos intercambiar ideas, de las cuales podamos aprender y que no nos llenen de toxicidad.
La actividad deportiva tiene la cualidad de mejorar la plasticidad cerebral, aumenta los reflejos, mejora nuestra memoria, capacidad de concentración y nos hace más productivos, a parte que nos ayuda a liberar el estrés y combatir la depresión y ansiedad.
La respiración que puede parecer algo tan básico, tiene mucha influencia sobre nuestro cerebro ya que a través de una buena técnica logramos oxigenar todo nuestro organismo y este es un recurso natural que tenemos para otorgarle nutrición y bienestar a nuestra mente.
Meditar, simplemente permanecer en silencio, respirar y sentir nuestra presencia, aquieta nuestra mente, nos da paz y nos invita a la introspección, a la autoexploración y conocimiento de nosotros mismos. Muchas veces esa brecha que se genera entre lo que somos y la realidad que vivimos, hace que nuestra mente viva en eterno conflicto.
El tipo de información con la cual nos relacionamos también genera una gran influencia sobre nuestro desarrollo mental, tipo de pensamientos, forma de expresarnos y ver la vida. La pregunta es: ¿con que tipo de información nutres a tu cerebro? Incluyendo programas, música, libros, cuentas de redes sociales…La mente es como un ordenador que se programa con lo que recibe y puede crear su propia realidad en base a esos elementos de los cuales dispone.
Esta información tiene la finalidad de hacerles reflexionar sobre todos aquellos puntos que forman parte de nuestra vida cotidiana y que de alguna forma son fuente de nutrición para nuestro cerebro. Es hora de tomar consciencia y acción para que esa energía que incorporamos a través de estos distintos medios, sea de calidad para nuestra mente.
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